Estupor me causó ver el día de ayer la conferencia de prensa de la serie sensación de la plataforma Netflix, el “Club de Cuervos”, cuando anunciaron a la marca alemana “Adidas” como nuevo patrocinador.

Le di mil vueltas en la cabeza, pero regresé al mismo punto, no me explico cómo pudieron apoyar a un club ficticio y abandonaron una verdadera mina de oro, como lo es las Chivas Rayadas del Guadalajara.

Recordemos que al final del Clausura 2016 la firma teutona rompió relaciones comerciales con el equipo más popular de México por dejar de transmitir sus juegos en la tele abierta, marcando un hito en nuestro balompié al ser el primer club en realizar sus partidos por Internet.

Según el diario de negocios “El Economista”, el promedio por temporada de venta de Chivas era de un millón de remeras, que, comparado con el estimado de aficionados rojiblancos en todo el país es de alrededor de 30 millones, es bajo para el millón de compras, pero si nos vamos a los números, el ingreso representa más de mil millones de pesos si tomamos en cuenta que cada indumentaria tenía un precio de $1100

Sinceramente no me explico por qué Adidas le entró a patrocinar a la serie en cuestión cuando también los pasan a través de la red, de la cual tenemos que pagar una suscripción mensual, sabiendo que no todos tienen acceso a la web por las condiciones económicas de millones de familias en México.

Lo admito, el célebre programa ha hecho un extraordinario trabajo en cuestión de publicidad y mercadotecnia, que ya la quisieran muchos clubes en la vida real, pero, ¿por qué dejar a Chivas y sí trabajar con un equipo ficticio?

Podemos observar las redes sociales, son miles de fans de la serie quienes ya quieren la playera, y es que nos divierten los personajes, que dicho sea de paso, nos dan una muestra de como se manejan las cosas en el fútbol nacional.

Bien pudo la empresa creada por Adi Dassler tener un poco de sentido común, si tienes en tu cartera de clientes al equipo con más aficionados en la República Mexicana, lo demás que entre, por ejemplo, incorporando al equipo del ficticio “Nuevo Toledo”, ya era mera ganancia.

Lástima que ya no hay marcha atrás. Chivas se ha sentido bien con Puma, sus ventas han tenido buena respuesta gracias al agradable diseño de la playera, sumando el aceptable desempeño de los dirigidos por Matías Almeyda en la fase regular del Apertura 2016. Adidas se lo perdió.

Las empresas siempre van a buscar el proyecto que mejor ganancia les deje, pero, reitero la palabra, por sentido común, no vas a soltar lo que da jugosas ganancias.

Esperemos que esta operación no le resulte costosa a Adidas, porque Club de Cuervos está feliz, pero quién sabe que tan rentable resulte el merchandising en el corto plazo, porque la serie uno la puede ver, a lo mucho, en una semana y olvidarse de ella.

Mientras tanto, a disfrutar de las locuras de Isabel y Chava Iglesias en ésta segunda temporada.

Twitter @DanieleonP